Así se puso de manifiesto durante la VI Conferencia Cermi Territorios celebrada hoy de forma telemática en la que se analizó, además, la situación sobre el acceso, orientaciones y gestión de fondos europeos al servicio de la inclusión por parte del sector social de la discapacidad en los diferentes territorios.
Coincidiendo con el Día Nacional de la Atención Temprana, que se celebra cada 16 de junio, desde el movimiento Cermi aseguraron que la Atención Temprana debería estar orientada, no a la medicalización, sino a la promoción de los niños y niñas con discapacidad, para dotarles de habilidades de autonomía personal, destrezas e instrumentos de sociabilidad inclusiva.
Además, se recordó que recientemente se ha aprobado la Ley orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia y que esto supone “un avance” y un “modelo inspirador” para futuras legislaciones que “es necesario renovar”. De la misma manera, se resaltó la importancia de esta temática en la agenda política de los Cermis autonómicos ya que “los niños y niñas con discapacidad requieren de intervenciones más precoces, tempranas e intensas que deben ir dirigidas a la inclusión y autonomía personal”.
PRINCIPALES PREOCUPACIONES
Por otra parte, se subrayó la situación de las listas de espera en Atención Temprana y los retrasos en la valoración y la parte diagnóstica. De hecho, tal y como aseguraron desde el movimiento Cermi “el alcance de los retrasos está siendo claramente un problema en comunidades como Madrid o la Comunidad Valenciana, donde la espera es de 16 y 12 meses, respectivamente”.
En este sentido, abogaron por aprobar y aplicar un Plan Concertado, entre la Administración General del Estado y las Comunidades Autónomas, para el desarrollo de una completa Red de servicios integrales de Atención Temprana y Apoyo al Desarrollo Infantil.
Otra de las preocupaciones que se plantearon es la situación de la Atención Temprana en la etapa de 0 a 6 años. En este sentido, recalcaron que es necesario “contar con servicios integrales y coordinados” de atención temprana y apoyo al desarrollo infantil en esta etapa. Además, afirmaron que es importante “definir los apoyos y protocolos de actuación” en relación a aquellas otras líneas de actuación sectoriales en los ámbitos de la salud, la educación y los servicios sociales.
Por ello, desde el movimiento Cermi defendieron que se facilite el futuro desarrollo normativo y aplicación efectiva de la Atención Temprana por parte de las Comunidades Autónomas al tiempo que solicitaron que se concreten las condiciones para la financiación, plena extensión, creación y dotación de la Red pública de servicios integrales de Atención Temprana y Apoyo al Desarrollo Infantil.
Otra de las propuestas que se expusieron fue la creación del Consejo Estatal de la Atención Temprana y el Apoyo al Desarrollo Infantil; o la creación de un Instituto Estatal de Atención Temprana, con funciones en I+D+i, calidad, evaluación y diseño curricular.